Después de un vertiginoso año y de promocionar su disco en México, el cantante se refugió hasta hace algunos días en una playa de Alicante. "Necesito ver el mar cada tanto", le dijo el intérprete español a Clarín.com. Por decisión de la compañía discográfica, el cantante estuvo alejado de América latina un tiempo y sus seguidoras quedaron esperando el regreso del intérprete español. Ahora se dio.
Pasaron más de veinte años desde que Dalma se hizo conocido por las canciones "Esa chica es mía" (1988) y "Bailar Pegados" (1991), tema con el que representó a España en el Festival de Eurovisión.
"Después de 17 años cambié de disquera. Muchas veces he tenido la sensación de no tener las cosas fáciles. Me he sentido solo y viví una situación de impotencia, de que algo había truncado mi carrera. Tras tantos años de ausencia, tenía temor de que la gente de la Argentina me hubiera olvidado porque no viajaba y todo se había cortado", reveló.
Dalma continuó grabando discos y girando por Europa. Con sus álbumes Vía Dalma I y Vía Dalma II, el cantante se convirtió en uno de los artistas que más discos ha vendido en España. El éxito obtenido le daba indicios de que lo ayudaría a impulsar su carrera en América latina.
"Con este proyecto me propuse recuperar a nivel mundial la música italiana que ha influido en mí".
La canción "El Mundo", incluida en Vía Dalma Internacional e identificada por el público argentino como el tema de los encuentros apasionados entre Natacha (Calu Rivero) y Julián (Juan Darthés) en Dulce Amor, sirvió para que el catalán reconquistara a sus seguidoras.
"Afortunadamente fue de gran ayuda estar todas las noches de la mano de una tira tan exitosa y sentirme acompañado por el apoyo de mi compañía discográfica para encarar una nueva etapa en el país", asegura.
La canción y su participación en la exitosa novela de Telefe lo ayudaron para que otras generaciones conocieran al intérprete. "Fue mi primera incursión en la televisión. Una experiencia muy divertida la de ponerse en la piel de otro personaje y disfrutarlo", recuerda.
Los nuevos trabajos del catalán proponen un viaje por los clásicos italianos que marcaron la historia de la música de todos los tiempos como "La cosa más bella" que popularizó Eros Ramazzoti o "Senza una donna" de Zucchero.
"Me sentía seguro con las canciones que elegí y cuando entré en ellas me tuve que enfrentar a una serie de desafíos. Ha sido un trabajo que parecía fácil pero no lo ha sido. Para un intérprete es un reto medirse con canciones tan famosas y darle su sello sin poder modificar ni una coma", explica.
El próximo proyecto de Dalma continuará en Milán, con el genovés Claudio Guidetti, el mismo productor de Vía Dalma I y II.
"Voy a grabar temas inéditos de nuevos autores. He participado en varios temas pero honestamente, si hay canciones mejores que los míos, prefiero interpretar los otros.
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